jueves, 4 de mayo de 2017

ESTE GENERAL SÍ TIENE QUIEN LE ESCRIBA

No conozco el Poder más que por lo que leo por aquí y por allá. No nací con él, y no lo he tenido, tengo ni creo que tenga jamás en ámbito alguno, pero a veces me interesa hacer alguna cata y mirar por la cerradura, a ver qué encuentro (algo tendrá cuando todos pelean por él, con esa violencia y con esas palabras tan vacías en mayúsculas).
Releo en estos días "Descubriendo al general. Historia de un compromiso", de Graham Greene, y me acerco al ejercicio del poder al estilo hispanoamericano como solamente puede deslumbrar a un inglés. En todo caso, Omar Torrijos era un personaje curioso, con un halo personal muy literario. Se le atribuye haber volado en un avión militar hasta Bogotá para tener un encuentro con una bella amante, encontrarla y volver a Panamá sin haber salido del aeropuerto (¿del aeropuerto? Del avión...), pero hay anécdotas suyas que me interesan más. Por ejemplo, como cuando felicitó a su amigo García Márquez por "El otoño del patriarca", asegurándole que era un gran trabajo, pues "los dictadores somos así", o cuando llamó a Pinochet para lograr que permitiera salir de Chile a una hija de Allende y, ante lo infructuoso de los argumentos, acabó por pedirle un favor "de dictador a dictador". La hija de Allende salió del país.
Omar Torrijos, por tanto, sí tuvo quien le escribiera. Ahora ando con eso, precisamente. 
Puro realismo mágico.

No hay comentarios:

Publicar un comentario